Según los hechos registrados, al encontrar una manada de jabalíes alimentándose justo al lado del pantano, un cocodrilo se acercó lentamente.
Cuando el cocodrilo abrió sus fauces de par en par, preparándose para atacar a los lechones, dos cerdos adultos se lanzaron hacia adelante y se turnaron para embestir al enemigo.
Ante el feroz ataque, el cocodrilo tuvo que permanecer quieto sobre la arena. En ese momento, al darse cuenta de que la situación peligrosa aún estaba por venir, los cerdos adultos llevaron rápidamente a los cachorros a un lugar seguro.